Filosofía, búsqueda de la verdad, partiendo de premisas autoevidentes: el estudio de la esencia de las cosas (metafísica), el proceso del conocimiento (epistemología). Los mecanismos del razonamiento (lógica), la definición del bien y el mal (ética).
Con la decadencia de la filosofía Escolástica, la filosofía queda reducida a la Metafísica. Ciencia y filosofía se contraponen como dos órdenes del saber completamente diferentes y esa estructura diferenciadora ha sido mantenida en nuestras universidades…
La ética es parte de la filosofía de vida de los seres humanos. El ser humano se posee a sí mismo por conocimiento, conciencia de sí mismo y libertad. Todo ser humano resulta para sí mismo un problema no resuelto, percibido con cierta oscuridad y poco a poco debe dar respuesta a la interrogante y el reto de su propia existencia. Es responsable de su vida, puesto que la hace y haciéndola responde con ella y de ella, y en este sentido es un ser constitutivamente ético. A lo largo de su vida se va conduciendo y comportando, para ello tiene que proyectar primero lo que va a hacer y obrar en consecuencia.
Un individuo al estar en una universidad se formará para ser un profesional, pero para lograr ser un profesional exitoso tendrá que poner en práctica su ética y moral. Deberá elegir entre varias posibilidades, ejecutar actos, abstenerse de otros, tomar decisiones y adquirir hábitos, asumir o cambiar actitudes. Pero ese ser humano en el hacerse así mismo encuentra pautas o modelos de comportamiento que recibe históricamente a través de la cultura, la misma que consiste precisamente en el repertorio total de respuestas a la vida que se encuentra a su disposición.
“Los niños y los jóvenes son como el cemento fresco; todo lo que les cae les deja una impresión indeleble”
Con la decadencia de la filosofía Escolástica, la filosofía queda reducida a la Metafísica. Ciencia y filosofía se contraponen como dos órdenes del saber completamente diferentes y esa estructura diferenciadora ha sido mantenida en nuestras universidades…
La ética es parte de la filosofía de vida de los seres humanos. El ser humano se posee a sí mismo por conocimiento, conciencia de sí mismo y libertad. Todo ser humano resulta para sí mismo un problema no resuelto, percibido con cierta oscuridad y poco a poco debe dar respuesta a la interrogante y el reto de su propia existencia. Es responsable de su vida, puesto que la hace y haciéndola responde con ella y de ella, y en este sentido es un ser constitutivamente ético. A lo largo de su vida se va conduciendo y comportando, para ello tiene que proyectar primero lo que va a hacer y obrar en consecuencia.
Un individuo al estar en una universidad se formará para ser un profesional, pero para lograr ser un profesional exitoso tendrá que poner en práctica su ética y moral. Deberá elegir entre varias posibilidades, ejecutar actos, abstenerse de otros, tomar decisiones y adquirir hábitos, asumir o cambiar actitudes. Pero ese ser humano en el hacerse así mismo encuentra pautas o modelos de comportamiento que recibe históricamente a través de la cultura, la misma que consiste precisamente en el repertorio total de respuestas a la vida que se encuentra a su disposición.
“Los niños y los jóvenes son como el cemento fresco; todo lo que les cae les deja una impresión indeleble”
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